Los primeros auxilios en adultos mayores son útiles para manejar caídas, quemaduras, problemas cardiovasculares u otros accidentes comunes. Te explicamos las principales medidas.
Conocer una serie de medidas de primeros auxilios en adultos mayores es algo fundamental para poder actuar frente a cualquier accidente. En los países desarrollados la esperanza de vida es muy alta. Tanto es así, que una gran parte de la población se encuentra por encima de los 70 u 80 años.
El problema es que, a medida que envejecemos, nos volvemos más vulnerables ante cualquier lesión. Es por eso que una lastimadura que en personas jóvenes no tendría por qué ser un riesgo, en adultos mayores puede poner en riesgo la vida.
Los primeros auxilios en adultos mayores cobran especial importancia en el caso de aquellas personas que cuidan de algún familiar o que trabajan para ello. En este artículo te explicamos cómo actuar frente a cada situación.
¿Qué accidentes requieren primeros auxilios en adultos mayores?
Los ancianos o adultos mayores suelen tener problemas de movilidad o ser más frágiles ante cualquier evento. La razón es que aumenta la incidencia de las enfermedades concomitantes. Por ejemplo, la osteoporosis, la hipertensión arterial y la demencia.
Además, las condiciones de salud a partir de cierta edad hacen que sea necesario considerar cómo realizar primeros auxilios en personas mayores. Los ancianos tienen más facilidad para estar confusos, asustados o con problemas de vista y audición. Por eso las medidas varían con respecto a los jóvenes.
Según explica un artículo de First Aid for Life, la gran mayoría de los accidentes que sufren las personas ancianas son las caídas. Lo peor es que casi un 75 % de las mismas conllevan lesiones en las extremidades o en los hombros.
Tal y como afirma una publicación de Know What To Do, las caídas suelen estar relacionadas con una pérdida de visión o con problemas del equilibrio. A su vez, es importante destacar que esa inestabilidad puede ser consecuencia de ciertos medicamentos.
Otra de las condiciones que hay que tener en cuenta en los adultos mayores son los sangrados. Es muy común que se empleen fármacos anticoagulantes para tratar trastornos cardiovasculares. Esto propicia que, ante cualquier lesión, haya más riesgo de hemorragia.
Otros accidentes comunes
Los problemas cardiovasculares son otras de las cuestiones más importantes a tener en cuenta en los ancianos. Por ejemplo, hay más riesgo de sufrir un ataque cardiaco o un accidente cerebrovascular.
Los primeros auxilios en adultos mayores también deben orientarse a tratar consecuencias de la diabetes, intoxicaciones por medicamentos o convulsiones. También es importante considerar el riesgo de que sufran deshidratación o cambios extremos de temperatura.
Primeros auxilios en adultos mayores según el caso
Según cuál haya sido el accidente, hay que realizar unas medidas de primeros auxilios en adultos mayores u otras. Hay que saber cómo actuar en cada caso para intentar reducir el riesgo de complicaciones. Te explicamos las situaciones más frecuentes.
1. Primeros auxilios en adultos mayores si hay una caída
La primera actuación de primeros auxilios en adultos mayores, sea cual sea la situación, es pedir ayuda. Cuando alguien se cae hay que intentar calmarlo y movilizarlo lentamente. Si aparece mucho dolor en alguna zona, una deformidad o incapacidad de movimiento, hay que evitar mover esa parte.
Si es posible hacerlo sin dolor, hay que ayudar a esa persona a levantarse. Para ello se recomienda colocarlo en cuatro patas para tener más estabilidad. Después se separan los codos del suelo.
En los casos en los que la caída haya provocado pérdida de conocimiento, sangrado o vómitos se recomienda acudir a urgencias. Lo mismo si hay dificultad para respirar o sospecha de algún hueso roto.
2. Cómo actuar ante un atropello
Los atropellos, por desgracia, son algo frecuente. Según explica un artículo de Madrid Salud, los primeros auxilios en adultos mayores deben seguir la estrategia PAS. Son las siglas de proteger, avisar y socorrer.
Por lo tanto, lo primero es apartar o proteger a la persona de la carretera. Hay que avisar de forma inmediata al servicio de emergencias. Una vez hecho esto, se hace todo lo posible por mantener la vía aérea despejada y detener cualquier sangrado.
3. Primeros auxilios en adultos mayores intoxicados
Las intoxicaciones en adultos mayores pueden aparecer por múltiples causas. Como a cualquier edad, es probable que se trate de un intento de suicidio y se debe considerar esa opción. No obstante, es más frecuente que se deba a algún error tomando la medicación.
Cuando aparece una intoxicación hay que averiguar cuál ha sido el causante. Si se identifica, lo ideal es comunicárselo al servicio de emergencias para que den pautas exactas de cómo actuar.
No se debe provocar el vómito ni aportar ningún otro líquido o medicamento. Si la intoxicación ha sido por algún gas, como dióxido de carbono o pinturas, hay que tratar de sacar a esa persona hasta una zona con aire limpio.
4. Actuar frente a un atragantamiento
Los atragantamientos pueden ocurrir a cualquier edad. Los primeros auxilios en adultos mayores no difieren demasiado al resto de las edades. Si no hay compromiso respiratorio, hay que animar a toser a esa persona y tranquilizarla lo máximo posible.
Si aparece dificultad para respirar hay que avisar a emergencias e iniciar maniobras para eliminar la obstrucción. Es la llamada maniobra de Heimlich. Lo que no se debe hacer es intentar extraer el objeto o el alimento con las manos ni dar golpes en el pecho.
Botiquín básico de primeros auxilios
Para poder realizar primeros auxilios en adultos mayores es fundamental tener un buen botiquín en casa. Lo ideal es que todas las familias lo posean, pero es aún más importante si hay alguien anciano en la casa. Debe contar con una serie de elementos imprescindibles.
Tendría que tener gasas, tijeras, tiritas y pinzas. También es importante que conste de cinta, toallas antisépticas y desinfectante de manos. Mejor si disponemos de compresas frías en el congelador y un termómetro.
Por otra parte, en casa debe de haber una serie de medicamentos generales básicos. Por ejemplo, antiinflamatorios, analgésicos, antipiréticos e incluso crema antiséptica. Los suministros varían en función de las condiciones de salud de los habitantes del hogar.
Por ejemplo, si se trata de un diabético tratado con insulina, será necesario contar con dosis extra. También se recomienda tener un monitor de presión arterial o un lector de la glucemia.
Hay que actuar con decisión y rapidez
Lo que debemos tener presente es que conocer las medidas básicas de primeros auxilios en adultos mayores puede evitar muchas complicaciones e incluso salvarles la vida. Hay que tratar de tener muy claro cómo se debe actuar en cada situación.
Lo ideal es que cada cuidador esté consciente en función de los riesgos de esa persona. Según qué enfermedades presente, habrá más probabilidades de sufrir unos accidentes u otros.
Por eso, se recomienda que los familiares se impliquen en las patologías de sus allegados y comprendan de verdad los riesgos. Si se actúa de forma rápida y eficaz hay menos probabilidad de que haya una lesión grave o irreversible.
Fuente: Mejor con Salud
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